Llegó un tiempo florido
y un sol que calentaba,
y una sonrisa de niña
coloreaba tu alma.
Un alma que se dividió
en sonrisas y miradas,
sonrisas que habían nacido
miradas que acariciaban.
Y nacieron porque tú
pusiste en ello tu barca,
esa que navega alegre
por tu mar...
nuestra sencilla esperanza.
La esperanza de sentir
tu mano que me cuidaba,
tu mirada siempre limpia
y tu sonrisa cercana,
una sonrisa que escucha
melodías y baladas.
"Las que susurras mamá
mientras tu voz...
acariciaba mi alma".
Lía
Para todas las que somos. Para las que lo serán. Para las que comprometieron en ello su vida y para las que, sin serlo, navegan en la misma barca.
Para todas ellas, hoy es su día... ¡FELICIDADES MAMÁS!!!.
Y en especial para la mía. Allá donde estés ¡FELICIDADES MAMÁ!!!. Tu sonrisa siempre fue mi Esperanza.
Tan colorido y hermoso que huele a madre.
ResponderEliminarY que solo las madres como tú, saben sentirlo en el fondo de sus almas.
ResponderEliminarPrimero hay que tener sentimientos, luego ser madre y después entender lo que transmite este sentimiento.
Tú Bea, reunes todas esas cualidades.
Un abrazo bonita.